– A ver, Jaimito, si en un bolsillo tienes 10.000 pesetas y en otro 34.000 pesetas, ¿Qué tienes en total? – Pues los pantalones de otro.

Jaimito, conjúgame el verbo nadar, y Jaimito dice gritando: Yo nado, tú nadas, nosotros nadamos… Y la maestra le dice: Jaimito, más bajito, y Jaimito dice: Yo buceo, tu buceas, nosotros buceamos.

Le dice Jaimito a su papá: ¿Te acuerdas que tú me dijiste que si pasaba de curso tú me dabas una bicicleta? Sí, me acuerdo. ¡Pues te la ahorraste!

Una vez Jaimito paseando por la calle ve a un señor que está vendiendo huevos. Entonces el vendedor dice: ¡Vendo huevos! Y llega Jaimito y le pregunta: ¿Para qué los quiero vendaos?

Va Jaimito y le dice a su profesora: Miss, aquí está mi trabajo. Y la profesora le responde: Pero este trabajo está muy pobre. A lo que Jaimito responde: Ah, entonces tome un dólar.

Jaimito llega corriendo a su casa y le dice exaltado a su mamá: ¡Mamá, mamá, a mi amiguito Luis lo picó un caimán! La mamá se ríe y lo mira diciendo: Jaimito, los caimanes no pican, los caimanes muerden. Entonces Jaimito le responde: No mamá, a mi amiguito lo picó en dos.

A ver Jaimito, ¿Cómo se llamaban los primeros habitantes de la tierra?, pregunta el maestro. Gómez y Pérez. ¿Cómo dices? Sí, porque en el paraíso terrenal a Adán le dijeron: «Si gomez de éste fruto, perezerás».

Estaba Jaimito en la escuela, y la maestra comienza a preguntar en que han venido. La profesora pregunta: Pepito, ¿en qué has venido? En un BMW. Juanito, ¿en que has venido? En un Ferrari. ¿Y tú Jaimito? En un Dodge. ¿En un Dodge? Sí señorita, en dodge patitas…

El padre pide ayuda a Jaimito para aparcar el nuevo coche: Dime si me doy con el coche de al lado. Al poco se oye un ruido y Jaimito le dice: ¡Ya le has dado!