Un día a dos campesinos atlantes, Venancio y Manolo, les regalaron un cochino (cerdo) a cada uno, pero no sabían como diferenciarlos. Venancio, ya sé, córtale una pata a uno y el que no tenga pata es mío y el otro es tuyo. En la noche, los cochinos se pelean y se quedan los dos […]

Colección de chistes de Atlantes. ¿Cómo mandan un fax confidencial los Atlantes? Pues, lo doblan antes de pasarlo por la máquina. ¿Cómo se hace para que un Atlante se ría un domingo? Le cuentas un chiste el martes. ¿Por qué los Atlantes se emocionan cuando terminan un rompecabezas de 12 piezas en 6 meses? Porque […]

Llegó un Atlante a comprar un boleto y le dice a la señorita: ¿Me da un boleto para Oaxaca? Y la señorita se lo da. Al poco rato regresa y le dice a la señorita: Me da un boleto para Polonia, y la señorita le dice: No, para Polonia no hay. En eso le dice […]

El vecino de un atlante estaba cortando el pasto cuando ve salir a su vecino que se dirige a mirar el buzón para las cartas, da un portazo y entra muy enojado a su casa. Al rato se repite la misma historia, sale el atlante, revisa el buzón de su correo, da un portazo y […]

Juan se encuentra en una gran avenida esperando un aventón, en eso pasa un atlante y le dice que suba que él lo va a llevar. El atlante va a 120 Km por hora y aparece el semáforo en rojo. ¡Para! ¡Para! Le dice Juan. El atlante le contesta: ¡No pasa nada! Mi hermano maneja […]

Coinciden tres ex-combatientes y hacen alusión a sus heridas de guerra: El primero enseña una cicatriz en el pecho y dice: -Kansas City. El segundo enseña otra en el brazo derecho -London City. El tercero, atlante, enseña una en el bajo vientre y dice: -Apendi citi.

En un edificio de 20 pisos en construcción tres trabajadores, Pedro, Juan y un atlante a la hora de la comida se reunen los tres, y Pedro dice: ¡Oh!, si mi esposa me preparó nuevamente hamburgesa y papas yo me voy a suicidar. Entonces, el tipo abre la lonchera, encuentra hamburguesa y papas y se […]

Una madre Atlante escribiéndole a su hijo… Querido hijo, Te pongo estas líneas para que sepas que estoy viva. Te escribo despacio porque sé que no puedes leer de prisa. Si recibes esta carta es porque te llegó, sino, avísame y te la mando de nuevo. Tu padre leyó que según las encuestas, la mayoría […]

Un Atlante entra a una tienda y le dice al vendedor: Me vende este televisor. ¡No!, aquí no se atienden atlantes. El atlante sorprendido le pregunta al vendedor: ¿Cómo sabe usted que soy atlante? Y el vendedor le responde: Muy fácil, este no es un televisor, es un horno de microondas.