Chiste Número #930

Una vez un muchacho que se llamaba Jesús y quería ir al cine pero no tenía zapatos así que se fue con un amigo y le dijo:

Amigo, préstame tus zapatos porque quiero ir al cine, y el amigo le dijo que no porque se los podía robar y Jesús le dijo que no y que de una vez le dijera dónde estaba el cine y entonces se los prestó y le dijo:

Mira, donde veas mucha gente ahí te metes.

Y se fue y vio mucha gente y que se mete, y era un templo. Después de un rato el amigo lo fue a buscar, en ese preciso momento el cura estaba haciendo misa y decía:

Jesús se fue al cielo…

Entonces el amigo grita:

¡Deténganlo, que no se vaya porque se lleva mis zapatos!